José Leal

Astrónomos de la Universidad Tecnológica Swinburne de Melbourne, Australia, encontraron lo que parece ser un plantea de diamante orbitando alrededor de un pulsar, a unos 4,000 años luz de la Tierra. Este nuevo planeta es mucho más denso que cualquiera conocido, su componente principal es el carbono y los científicos creen que éste se encuentra cristalizado.
«La historia y sorprendente densidad del planeta sugieren que podría tratarse de un diamante masivo dando vueltas alrededor de una estrella de neutrones, aproximadamente cada dos horas, en una órbita tan pequeña que cabría dentro del Sol,» señala Mathew Bailes, investigador de la citada universidad.
Este planeta probablemente es un remanente de lo que alguna vez fue una estrella masiva, y que perdió sus capas externas por la fuerza del pulsar que orbita. Los pulsares son pequeñas estrellas de neutrones muertas, de solo unos 20 kilómetros de radio, que giran sobre su propio eje cien veces por segundo, emitiendo poderosa radiación. De acuerdo a Bailes y sus colegas, las mediciones indican que el planeta podría tener la masa aproximada de Júpiter pero una densidad veinte veces mayor.
En el caso del pulsar J1719-1438, cuya radiación es regularmente monitoreafa desde la Tierra por obserbatorios en Australia, Gran Bretaña y Hawaii, ha sido posible detectar los movimientos que causa el pulsar.
In the case of pulsar J1719-1438, the beams regularly sweep the Earth and have been monitored by telescopes in Australia, Britain and Hawaii, allowing astronomers to detect modulations due to the gravitational pull of its unseen companion planet.
La agencia Reuters informó que además de carbono, el planeta podría contener oxigeno, sobre todo en sus capas externas. Su densidad sugiere también que otros elementos como hidrógeno y helio, que se encontrarían en los gigantes gaseosos como Júpiter, no están presentes. La apariencia de un objeto tan exótico como el detectado por Bailes permanece todavía un misterio, y los científicos se reservan conjeturas.