De acuerdo a información publicada en línea el 31 de marzo del 2011 y en otros números de la revista Science, datos enviados por las sondas de la NASA, Cassini, Galileo y New Horizons, han permitido demostrar, a científicos de la Universidad de Cornell, en los Estados Unidos, que, contrario a lo que se creía, los anillos de Saturno y Júpiter han recibido impactos de diversos cuerpos celestes, como asteroides y cometas, que han dejado huella en su superficie.
Para Matthew M. Hedman, Mark R. Showalter y Josepp A. Burns, investigadores y autores de estos artículos , ahora se sabe que los impactos son muy comunes, pues suceden, en Júpiter, un par de veces por década y en Saturno, cada 100 años y que los anillos registran estos impactos, como surcos en un disco de vinilo, lo que permite conocer su historia.
Con esto, agregan, se comprueba que nuestro sistema solar es un lugar más dinámico de lo que se pensaba y que los anillos de estos dos planetas han sido afectados por sucesos que ocurrieron hace solo 30 años, en lugar de cómo se pensaba, cientos de millones de años atrás. Asimismo, dicen, las ondas en los anillos nos hablan del tamaño de las nubes de escombros que los impactan.