Desde hace algún tiempo se ha marcado una competencia disfrazada, entre la tasa de procesamiento de una red computacional en contra o versus una red neuronal. Uno de esos enfrentamientos se dio en 1997 cuando la computadora Deep Blue de IBM derrotó a los mejores jugadores de ajedrez, cambiando la forma en que vemos a las computadoras y preguntándonos si pueden pensar por ellas mismas, similar a lo que hacemos nosotros los seres humanos a diario.
Recientemente se dio otro enfrentamiento entre máquinas y humanos en el famoso concurso estadounidense “Jeopardy” (dentro del cual se responden preguntas sobre diversos temas como ciencia, literatura, religión, arte, economía, política, entre muchos otros), donde una computadora desarrollada también por IBM, con el nombre de Watson (sistema computacional de inteligencia artificial capaz de responder preguntas expresadas en el lenguaje de los seres humanos), se enfrentó a los mejores jugadores del juego en cuestión.
El resultado fue que Watson derrotó a sus contrincantes humanos, marcando un hito en ese tipo de competencias y haciéndonos ver que la computadora puede comprender el lenguaje humano, buscar información en su amplia base de datos y responder de igual forma la respuesta que cree que es correcta.
Fue así que la red neuronal compuesta por aproximadamente 100 mil millones de neuronas con 100 millones de millones de conexiones, de acuerdo a Carl Zimmer, contendieron mentalmente contra el hardware de dos unidades de 5 bastidores, con 90 servidores IBM POWER 750. Cada servidor posee 4 procesadores de 8 núcleos cada uno, donde cada núcleo soporta por hardware 4 hilos de ejecución (threads), con una RAM que supera los 15 TeraByte, según datos de Wikipedia.
Lo que se espera de estos desarrollos, según los expertos de IBM, es que va a cambiar la forma en que accedamos a la información. Watson es un sistema de preguntas y respuestas, donde la pregunta puede ser formulada en lenguaje de nosotros los humanos y la respuesta proviene de la amplia gama de información que tiene la computadora y se obtiene una respuesta muy precisa, según comentarios del doctor Eric Brown, investigador del proyecto Watson.
En forma computacional el sistema recibe una pregunta, posteriormente se analiza la pregunta, para generar una especie de hipótesis, que se apoya en la recolección de evidencia que la soporte, filtrando datos y al final se fusiona la información cruzándola y dándolo un rating de evidencia, validando así la hipótesis con algoritmos matemáticos para obtener la respuesta deseada, de acuerdo al doctor David Ferrucci, líder del proyecto Watson.
Por ejemplo, de acuerdo al artículo de Scientific American titulado “Watson looks for work” de Michael Moyer, se dice que un sistema como Watson funciona como una herramienta de traducción, transformando el inglés en ingeniería. Para la competencia de Jeopardy, el sistema tenía cargadas unas 200 millones de páginas de enciclopedias, periódicos y trabajos de literatura.
Es así que IBM quiere utilizar las fortalezas titánicas de sistemas como Watson, para apoyar a médicos a que encuentren la solución a un caso complicado de medicina donde requieran consultar diferentes fuentes bibliográficas médicas y recetar el correcto tratamiento.
También se quiere apoyar en la parte de los juzgados, pues ahí se forman expedientes con demasiada información, así como ayudar a resolver casos complicados cuando se tiene que hilar o encontrar patrones para culpar o absolver a una persona.
Al igual que apoyar a los sistemas financieros para detectar anomalías o darle seguimiento a la contabilidad de alguna empresa transnacional, mismas que manejan diverso terabytes de información.
Lo interesante es estar atentos al siguiente paso de la inteligencia artificial de estas supercomputadoras.